'

jueves, 21 de abril de 2016

MÁS EJEMPLOS DE GENERALIZACIONES EN LA PNL

Como mencionamos en nuestro artículo anterior, según Bandler y Grinder, las generalizaciones son procesos que realizamos en nuestras mentes y que consisten en representar experiencias particulares como si fuesen generales. En este artículo proporcionaremos más ejemplos que puedan ilustrar como se dan estas generalizaciones en nuestra vida normal.

Cuando alguien dice “soy miedoso” está haciendo una generalización. La primera pregunta que se le puede hacer es, ¿a qué o a quién le tienes miedo? De repente nos dice le tengo miedo a los perros porque de chico un perro me mordió. Entonces nos damos cuenta que no es que sea miedoso en términos generales sino que específicamente le tiene miedo a los perros.

Si quisiéramos hacer esto un poco más evidente para la persona que nos ha dicho que es miedoso, podríamos preguntarle, ¿hay algo a lo que no le tengas miedo? De repente, nos podría contar que no le tiene miedo a la velocidad, es más le gusta correr con su motocicleta a alta velocidad en la carretera. Con esa respuesta se ratificaría que no es miedoso en términos genéricos, ya que en otros temas como el manejo de las motocicletas es bastante audaz.

Al caso que hemos relatado anteriormente los autores lo denominan como un caso de oraciones sin índice referencial. Es decir, cuando la persona dijo “soy miedoso” no estaba haciendo referencia a nada en especial. Si alguien la escucha podría hacerse la idea que esa persona le tiene miedo a todo. Y lo peor de todo, de tanto decirlo, la misma persona podría llegar a pensar que ella le tiene miedo a todo.

Otro ejemplo, alguien nos podría decir “no como pescado porque me atoro con las espinas”. Una pregunta que le podríamos hacer es, ¿pero cómo específicamente te atoras? Imaginándonos, nos podría contar que las veces que le había pasado eso, era porque había estado distraído en las conversaciones mientras comía. Le podríamos repreguntar entonces, ¿si cuando comes pescado estuvieras más concentrado en lo que comes, te pasaría lo mismo?, o quizás, hay muchas personas que comen pescado y no les pasa eso, ¿a qué piensas que se debe?

En este otro caso, según Bandler y Grinder lo que se presentan son oraciones con verbos inespecíficos. Es decir, cuando la persona decía “me atoro con las espinas”, el verbo “atoro” no especificaba como se producía el atoro.

Lo importante es que esta clase de generalizaciones simples o más complejas pueden estar limitando nuestras acciones en nuestra vida cotidiana. Por eso es bueno acostumbrarnos a reflexionar sobre ellas y desafiarlas. Y si esto se nos hace complejo al principio, para eso podemos recurrir a un coach.

Hasta el lunes.