'

lunes, 25 de enero de 2016

DE LA RESIGNACIÓN A LA AMBICIÓN

Según Rafael Echeverría la resignación es el estado de ánimo que parte del juicio de que no podemos hacer nada para cambiar una determinada situación con la que no estamos de acuerdo. Es decir, no vemos la posibilidad de realizar acciones futuras que logren el cambio que queremos. Y no vemos esas posibilidades porque en algunos casos no sabemos que existen, y en otros casos, porque teóricamente sabemos que se podría hacer, pero tenemos el juicio que así lo hagamos no lograremos nada.

En este estado de ánimo de resignación el horizonte de posibilidades de acción de las personas será nulo o muy restringido, vivirán apagados, en inacción y pensando que no pueden hacer nada para lograr el cambio de algo que no aceptan pero que a su juicio no pueden hacer nada para cambiarlo.

Por el contrario el juicio que está detrás del estado de ánimo de la ambición, es el de la visión de un amplio espacio de posibilidades de acción para lograr cambiar situaciones con las cuales no estamos de acuerdo. Las personas que viven en el estado de ánimo de la ambición, son entusiastas y ven oportunidades donde otras personas ven obstáculos.

Pero la pregunta lógica que surge en este punto es: ¿qué podemos hacer para pasar del estado de ánimo de la resignación al de la ambición?

Bueno, al igual que en el caso de los juicios y de las emociones, la clave está en el proceso reflexivo. Ya sea mediante la autorreflexión o mediante el apoyo de alguna persona amiga, técnica o coach, que nos ayude a reflexionar y tomar consciencia de los juicios que están detrás de nuestros estados de ánimo.

Una vez identificados los juicios detrás del estado de ánimo de la resignación podremos reflexionar sobre sus fundamentos. Como ejemplo, nos podremos hacer preguntas tales como:

-      ¿Realmente no podemos hacer algo para cambiar la situación? Muchas veces no hacemos este ejercicio porque consideramos nuestros juicios como verdades absolutas.
-       ¿Hay personas que hayan estado en nuestra misma situación y han podido salir de ella?, ¿qué hicieron? Las conversaciones que podamos sostener con personas con experiencias exitosas en situaciones como la nuestra nos pueden dar un aprendizaje valioso.
-      ¿Hay algo que yo debo aprender?, ¿cómo, cuándo, dónde? En mi opinión, la obtención de nuevos aprendizajes siempre significarán un incremento en nuestro horizonte de posibilidades de acción.
-       ¿Qué conversaciones debo realizar, y con quién? Las conversaciones tienen poder y es bueno aprender a planearlas y realizarlas.

Hasta el jueves.