Una de las principales
corrientes dentro del coaching es la Programación neurolingüística (en adelante
PNL). Richard Bandler y John Grinder en su libro La estructura de la magia I,
desarrollan su teoría basada en que los seres humanos creamos mapas mentales para interpretar el mundo.
Los autores explican que el
mundo es la representación completa de la realidad y lo que hacemos los seres
humanos es construir mapas mentales que nos sirven para interpretar ese mundo,
y actuar en él. Como sabemos una de las características de los mapas es que
establecen límites. En el caso de nuestros mapas mentales ellos también
establecen límites en nuestras mentes que restringen nuestro horizonte de
posibilidades de acción.
La construcción de estos
mapas mentales estará en función de los conocimientos que adquirimos los seres
humanos. A mayores conocimientos tendremos mayor capacidad de acción y menores
límites mentales. Sin embargo, para la construcción de estos mapas mentales los
seres humanos tenemos tres limitantes principales: neurológicas, sociales e
individuales.
Las limitantes neurológicas
son las relacionadas con nuestro cuerpo, es decir con nuestros sentidos y sistema
nervioso. La mayor capacidad con que desarrollemos nuestra corporalidad
neurológica ampliará nuestra capacidad de acción y reducirá nuestros límites de
acción en este aspecto.
Luego tenemos las limitantes
sociales referidas a las comunidades en las cuales vivimos. Es decir, en
función al mayor número de comunidades en las cuales vivamos se ampliará la
cantidad conocimientos que adquirimos en ellas, y se reducirán nuestros límites
de acción. Aquí estamos hablando de las comunidades según la geografía (países,
ciudades, distritos, etc.), según la profesión u oficio de cada persona, según
el deporte que se practica, según el arte que se realiza, etc. Dada la diversa
e ilimitada cantidad de actividades que puede realizar cada ser humano el
límite es estrictamente personal.
Finalmente tenemos las
limitantes individuales que están compuestas por todas las experiencias
particulares en nuestra vida. Es decir las vidas con mayor variedad y riqueza
de experiencias tendrán mayores conocimientos y menores límites de acción.
En conclusión, todos los
seres humanos hemos construido los mapas con los que interpretamos el mundo de
acuerdo a nuestros límites neurológicos, sociales e individuales. Es decir, en
la medida que tengamos menos límites en esos tres aspectos, la riqueza de nuestro
mapa y de nuestro horizonte de posibilidades de acción será mayor.
Hasta el jueves.